Son diversas las patologías que pueden adolecer en un organismo humano, pero muchas de estas comienzan por ser silenciosas, asintóticas, e incluso pueden llevar años dentro del cuerpo sin ser perceptibles, hasta que una revisión médica de rutina lo descubre todo.
Uno de estos casos patológicos que comienzan sin ninguna sospecha, es la aparición de un nódulo tiroideo, el cual puede ser apercibido como parte de una examinación general del organismo, o bien a consecuencia de un eco que se realice en dicha zona, si el tema te interesa, te invitamos a leer este post.
¿Qué es un nódulo tiroideo?
Esta clase de nódulos son considerados quistes de aspecto sólido y/o cargados de líquido que se ubican dentro de la tiroides, una glándula de pequeño tamaño, que se encuentra en la parte anterior del cuello, justo encima del esternón.
Cuando los nódulos comienzan a reproducirse en la tiroides, esta puede verse afectada en su funcionamiento, algo que da a lugar a una serie de malestares que la persona suele pasar por desapercibidos, habida consideración que estos son muy comunes a demás enfermedades temporales.
Síntomas ante los cuales debes de estar atento
Como bien te indicamos en líneas anteriores, este nódulo no suele causar síntomas de inicio, no obstante, hay personas que manifiestan sentirlo una vez que se palpan el área del cuello.
También es posible, indican los médicos, que este crezca fuera de la tiroides, ocasionan una obstrucción en las vías respiratorias o digestivas, de aquí que la persona comience a presentar dificultades para deglutir los alimentos o para respirar, cuando esto ocurre es porque el quiste ha sobrepasado su tamaño y es necesaria la extirpación del mismo por vía quirúrgica.
De igual forma resulta posible, que este no sea del todo perceptible con el tacto, sino que puede acontecer que cuando la persona se encuentre apresurada, atareada, estresada o realizando un trabajo difícil que involucre fuerza de la parte superior del cuerpo, el nódulo se expanda y se haga notar como un abultamiento en la base del cuello, punto en el cual, resulta molesto para la realización de determinados movimientos, como lo sería el girar la cabeza a un lado.
Como bien puedes apreciar, estos resultan o no perceptibles, por lo que más debes de estar es atento a sus síntomas cuales son:
- Adelgazamiento abrupto, una de las principales señales es que la persona comienza a perder peso con gran rapidez, llegando a disminuir hasta dos tallas por mes.
- Sudoración excesiva, algo que influye en el peso, sin importar cuál sea el ambiente, y menos cual sea la ropa, la persona se mantiene siempre sudada, llegando esto a generarle una verdadera incomodidad.
- Taquicardia, en los casos clínicos se puede constatar que los pacientes siempre manifiestan latidos acelerados, es decir, que se encuentran con las palpitaciones cardiacas constantes, hecho que les desencadena un estado de nerviosismo y de intranquilidad, al punto tal que no pueden sobrellevar sus actividades diarias con normalidad.
- Frío o escalofríos, es aquí cuando la persona comienza a sentirse preocupada por su salud, pues suele cursar la sudoración con la frialdad, siendo esta la principal señal de que algo no anda bien en el organismo.
Todos estos síntomas se corresponden con un incremento de la tiroxina, hormona que influye en el metabolismo e incluso en el crecimiento, tanto así, que cuando los nódulos aparecen en la adolescencia pueden llegar a influir en el desarrollo corporal, por tal motivo, resulta siempre acertada su atención a tiempo.
Tratamientos
Todo dependerá del criterio médico, ten en cuenta que los especialistas son los únicos que pueden recomendarte lo que consideran más conducente para tu caso médico, es por ello, que nosotros solo te indicamos las posibilidades de tratamiento que pueden suscribirte, dependiendo de tu situación, cuales son:
- Terapia hormonal, en algunas ocasiones la colocación de inyecciones o la ingesta de pastillas puede ayudar a contrarrestar los efectos nocivos que un nódulo pueda ocasionar.
- Cirugía, esto solo se hace cuando resulta extremadamente necesario y muchas veces involucra la extirpación de la tiroideo, ello se genera por el excesivo crecimiento del quiste que impide la ingesta de comida o peor aún que impide la respiración de forma natural.
Dejar una contestacion